sábado, 2 de enero de 2021

Lee, amigo, lo que me inspiraron tu foto y tu pregunta



¿Este niño-ángel que encontré el otro día en Galerazamba, subía al cielo o regresaba al mar?

AÑO NUEVO
1 de enero 2021
A mis nietos, a la foto de Alvaro y a Beethoven

Cuando desperté
del año anterior
reviví solita
entre cenizas.
Volví a ser el mismo
O la misma,
igual.
Desde mis ochentas
O los que fueran
Diez, veinte y cincuenta,
lo tuve que saber:
no existirás
sino contigo mismo
como aquel niño
de una foto.
Desde una inmutable
soledad
esperanzada
y vaga.
Desde la perpleja duda:
¿Cielo, o mar?
En cualquier caso,
créete a ti mismo
o misma.
Tendrás incorporado
lo que eres .
No existirás
sintigo mismo.
o misma
Lo que es igual.
Deja a un lado
Los miedos de los otros.
No necesitas
de redes ni cenizas.
Beethoven
el sordo aquel,
no estuvo para otros
sino para si mismo.
No buscó la plenitud
en el horóscopo
de la virtualidad
ajena.
Ni en sus redes
ni en las tuyas
sino en lo que era:
misma o mismo
sordo o mudo.
Da igual.
(Foto Álvaro Restrepo, Cartagena)