miércoles, 19 de junio de 2013

LOS TRES CAINES: ¿POR QUÉ ES LA MEJOR SERIE SOBRE UN ASPECTO DE LO QUE NOS HA PASADO EN COLOMBIA?

¿Qué  decía  esa letra de advertencia  al comienzo de  cada capítulo  de la serie y que no se alcanzaba a leer? Pues algo  como “escenas de violencia  examinadas en un contexto histórico y social, que representan sucesos de una época que alteró gravemente al pueblo colombiano”. Ese propósito parece haberse  cumplido mejor que en otros casos.
  
Pablo, el Patrón del mal, focalizó  el mal  en un “héroe”, utilizando  estereotipos  de la historia sabida  del capo Escobar.  La serie  Los tres caínes la supera de lejos  al centrar los conflictos  sicológicos no sólo en las madres  sino  en  tres hermanos, retomando  el mito  de Caín y  Abel, trascendiendo lo melodramático para llegar a lo trágico,  y  mostrando aspectos desconocidos de las entrañas del paramilitarismo.

La cadena RCN tiene el  mérito de haber aceptado que se abordara  el tema  del paramilitarismo en el  contexto actual  de  otra polarización ( “pro” y “anti” proceso de paz) y  en momentos en  que  se está diluyendo  la importancia  que tuvieron las AUC en la violencia colombiana,  como reacción a la  guerrilla.

 En  vez  de focalizar la serie  en El malo y en las buenas víctimas, se  centra en las  consecuencias de criterios equivocados sobre la solución de conflictos, como el que tenía Carlos Castaño,  y desmenuza   las diferencias internas  que suscitó el  tema del narcotráfico  en las AUC.

  Estas diferencias  son  sintomáticas de lo que, de una manera u otra,  permeó  la sociedad   colombiana en las últimas décadas. Y seguramente tendrán  incidencia en el porvenir de las FARC, entre los que  seguirán partidarios del narcotráfico y los que no.

  Episodios como las masacres,  sin  “porno-violencia”,  o el caso del Alcalde de El Roble y el gobernador  Arana recordaron a las  víctimas en sus contextos. Demostraron que no eran válidos  los temores  - por cierto bastante  primarios- que expresaron algunos  sobre  la manera como  estaban “ausentes” esas víctimas  y los mensajes que dejaría la serie.

  Porque  una  dramatización compleja  no  se puede  limitar  a  hacer  llorar  a los familiares de las víctimas  ( en un país en donde  demasiados colombianos son insensibles, no quieren ver lo que le pasa a sus compatriotas ni deducir sus consecuencias, como si nada  hubiera sucedido).

 En un caso como en el otro,  en  Escobar, el Patrón el Mal como en  Los Tres Caines,  se mezclaron equívocamente nombres   reales y ficticios,  por el  temor a demandas de los involucrados. Pero  a diferencia del Patrón del mal sin, en este caso, la motivación de hacer  quedar bien a los familiares  de Galán y  Don Guillermo  Cano, olvidando personas tan importantes como  José  Salgar, para el Espectador y Enrique Parejo para el nuevo Liberalismo, como  lo mencionamos en una  entrada  anterior.

 Hubo, sin duda, algunas fallas, como el fugaz  “noviazgo”  melcochudo de la madre de los Castaño,  o la caracterización  demasiado “silenciosa” de  Alfonso Cano, y Reyes. Pero  quedan  compensadas,  en su conjunto,  por la intensidad dramática de  escenas como el suicidio de la hermana,  o la propia muerte de los hermanos, en  las que el morbo  de mostrar no es  el elemento principal de la escenificación de la violencia, sino  que EL MAL encierra su propia destrucción.

Frente  al esquema simplista de melodrama utilizado en  El patrón ( el bueno, el malo,  el tonto  y la víctima) Los tres Caines  se adentró  en el  sentido  trágico  de la historia  de los tres hermanos  para encontrar allí  el castigo, en la  almendra del mal, cuando el odio se vuelve circular  y , como el alacrán, se devuelve contra  los protagonistas, víctimas macabras de su propio invento.

La impecable actuación de los tres  Caines, Julián Román, Elkin Díaz y Gregorio Pernía y la excelente dirección  contribuyeron   sin duda a darle mucha fuerza  al excelente   guión de Gustavo Bolívar y su equipo  (los periodistas  Alfredo Serrano y Weimer Uribe).  Demuestra Bolívar ser el mejor  en este campo, a pesar de las resistencias  celosas de colegas,  despreciativos de su manera de narrar.

Además,  los personajes  secundarios , en particular la madre Luz Estela Lenguas y  Luciano,  “sombra “ de Carlos Castaño, o Eilen  Moreno en el papel de Romualda, y prácticamente todo el equipo  no  crearon  el habitual desbalance  ( debido  principalmente a  que  por lo general, las cadenas se han acostumbrado  a no contratar actores profesionales, a los  que se les paga mucho  menos que a los  protagonistas principales).

  Se anuncia  con bombos y platillos por  RCN  La prepago” que ,  a juzgar  por los clips de   
propaganda,  tiene el contenido de  sexo  que subirá el rating  mediante un  formato  que idiotiza a los televidentes.

Ojalá entonces que  después  de Los tres caínes  sigan  otros  intentos de explicar, a través de un medio tan influyente en los imaginarios colectivos  como  el televisivo; que  se reviva  nuestra historia; y que  se plasme en una catarsis  lo que nos ha  sucedido como  país, más  allá de construcciones académicas  ficticias o análisis  simplones de nuestra identidad . 

Recomendado: releer  “Mi confesión,  Carlos Castaño revela sus secretos”  de Mauricio Aranguren, Editorial Oveja Negra (2001), en donde además  encontré  el retrato de Fidel  Castaño  por Oswaldo  Guayasamin ( ver  más arriba)


1 comentario:

  1. Bueno, realmente como tu dices ed una opinion.....xq parece q no la hayas vivido.....en cuestion de novela si ed mejor...pero en cuestion de vida real..sin duda alguna...pablo escobar marco mas la vida de los colombianos. Que un conflicro interno y pleitos fe faldas dw una familia que se creian el putas o intocables.....
    Pero para matwrcen entre ellos.si es q estan muertos......es q les faltan muchas tuercas en la cabeza.....x sierto.....ver la historia en novela es una cosa....vivirla literalmente es otra.....
    A veces se aprende mas en silencio y observando....de lejitos....sin mererce en el conflicto....pero todo es muy diferente a como se cuenta......
    Carlos castano gil...nunca fue arrestado.....como saben q. Ese es el cuerpo de el.,....no el de uno de sus tred hermanos

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