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Reseña
L´ ALGORITMO E L´ ORACOLO *
Come la scienzia predice il futuro et ci aiuda a cambiarlo
(Cómo la ciencia predice el futuro y ayuda a cambiarlo)
ALESSANDRO VESPIGNANI con Rosita Rijtano
Saggiatore 2020
En un estilo agradable, este italiano, uno de los científicos de las predicciones y de la ciencia de la complejidad más reconocidos mundialmente, cuenta “como todo podrá suceder un día; lo que, sin darnos cuenta, ya está sucediendo” . Y todo eso en menos de treinta años.
El autor recalca cómo ahora un ejército de algoritmos nos ayudan a prever lo que ya está previsto en todos los campos que nos atañen como seres humanos: sea de consumo, arte, literatura, sociología, política cine o epidemias. Prever ha sido siempre un deseo antiguo del ser humano, a veces frustrado, a veces cumplido, de conocer el futuro de antemano. Nos invade el deseo social de actuar como oráculos ( o brujos , o pitonisas o astrólogos) de lo que nos pueda suceder en ese futuro. De allí el título del libro
Alessandro Vespignani es profesor de física y matemáticas de la universidad Noreastern de Boston. Allí llegó por sobresalir en su universidad italiana y seguir el consejo de un amigo de aceptar un trabajo en los Estados Unidos (a diferencia de no pocos migrantes, que creen que allí está el paraíso y se lanzan sin paracaidas ). Desde allí, presencia dos revoluciones : la capacidad humana de predecir y controlar, de hacerlo a través de la revolución digital, que se convierte en una obsesión. Y siente la necesidad de explicar a los que llamo “analfabetas digitales”.
Vespignani recalca: la recogida de datos permite, en esta época revolucionaria que vivimos o usufructuamos ( la mayoría de los seres humanos, pienso, sin darnos cuenta) no significa mayor conocimiento. Lo compara con un bulto de ladrillos, que no es lo mismo que una casa. Y define el algoritmo : “ Una serie de instrucciones y de expresiones matemáticas que se usan para encontrar asociaciones, identificar tendencias, extraer la leyes y dinámicas de fenómenos como el contagio, la difusión de ideas o el comportamiento del mercado financiero” (17).
Como todos los que poseen el saber de su respectivo campo, su explicación se vuelve sencilla: los algoritmos son modelos de aprendizaje de carácter automático que utilizan la estadística para sacar conclusiones sobre la similaridad de datos. De allí, se construyen ecuaciones y reglas que llevan a simulaciones de los propios individuos y sus interacciones, por ejemplo en los contagios de enfermedades “y otros fenómenos donde el átomo social tiene un rol esencial. “
Pero eso si, Vespignani advierte de una vez que los resultados de la suma de miles y millones de comportamientos no se refieren a un solo individuo en particular, sino que dan, por así decirlo, pautas de comportamiento y predicciones, por cierto mucho mas precisas que las de los oráculos délficos.
¿En qué se parecen un oráculo délfico y un algoritmo? En la entrada del Oráculo de Delfos, el consejo era : "conócete a ti mismo." ¿ Será el mismo ahora con los algoritmos ?
https://es.wikipedia.org/wiki/Templo_de_Apolo_%28Delfos%29
En 2018, el autor empezó a trabajar en el libro mientras escalaba en conocimiento y le ofrecían ser parte del equipo que buscaba investigar la incidencia del recientemente expandido virus del Siga en América Latina, equipo que logró proyectar la futura evolución de la epidemia de 2016 a 2018.
Se trataba, en el fondo, de una modalidad de oráculo. Es decir, de predicción del futuro. El tema no es nuevo, como en el oráculo de Delfos, o para los astrónomos de Babilonia, dos mil años antes de Cristo. Proviene de ese deseo consustancial al ser humano de conocer y conjurar al futuro, que hoy es “una fábrica de predicciones y profecías “ . Por eso, el autor se propone desmitificar “ el aspecto mágico del poder de estos ídolos digitales llamados algoritmos" ( 19).
El libro explica el recorrido para llegar a la condensación del comportamiento de los individuos en fórmulas matemáticas. Lo interesante: el largo camino recorrido se basa en la teoría. Por ejemplo, las interacciones de los elementos del sistema que se estudie, si son cuerpos celestes, han permitido descubrir un planeta, primero a través de las ecuaciones y luego, comprobar su existencia real ( en el caso de Urano).
Así es como también relata Vespignani cómo un grupo de meteorólogos del Instituto de Estudios Avanzados de New Jersey logró, por computarización, materializar el primer servicio de previsiones meteorológicas iniciado en 1950 y, en el curso de 50 años, crecer el pronóstico de un dia por decenio. Ese mismo sistema de predicciones que consultamos los seres humanos para saber qué ropa ponernos si va a llover, en los próximos diez días y que incluye, desde luego la probabilidad de certeza, de la que el común de los mortales no nos ocupamos.
Pero sin meternos en ese mundo de probabilidades, indescifrable para analfabetas como yo y, como probablemente muchos de ustedes, se alcanza a comprender que de los oráculos se llegó hoy a laciencia de las predicciones, que asimila datos, modelos matemáticos inteligencia artificial “convirtiendo al ser humano en un átomo social y rindiéndolo así predecible” (31)
¿Miedosísimo? ¿No tanto como los oráculos? En todo caso, me suscita la reflexión de cómo los seres humanos del rebaño muchas veces vivimos en un mundo en el que las barreras entre los científicos y los demás seres terrícolas se vuelven casi infranqueables, de no ser porque algunos científicos se preocupen por explicárnoslos, como lo hace Vespignani. Así como los niños aprenden a leer y escribir, así nos encontramos los mayores de 50 años del planeta, pero también quienes, de todas las edades, utilizan lo digital automáticamente, y sin preguntarse, como lo hace cualquier adolescentebacelerado.
Oráculo de Delfos
Prever todo, prever pronto… ¿ y enloquecer o manipular?
“Estábamos abriendo las puertas de un nuevo mundo algorítmicamente previsible y algorítmicamente previsto “ escribe el protagonista: “entre más preveíamos, más queríamos prever”.
La lógica algorítmica pronto abrió un montón de posibilidades y no solo en la ciencia sino, por supuesto, en el mercado. Por eso, como también advierte el autor, puede volverse alienación. Ejemplo : Spotify , “factorización de matrices (82) nos ofrece la música que "nos gusta" pero también alienación, como en el caso del futbol y de las apuestas. ¿Nos llevará al horror de que nuestro futuro nos vuelva números? No, si somos conscientes de sus retos y de no perder el libre arbitrio.
Por eso también previene el experto, los algoritmos empezaron a volverse perjudiciales y no solo en el caso más conocido de Cambridge Analytics con su influencia focalizada en las ideas de los electores, en el reforzamiento del racismo o en las mercantilistas probabilidades entre consumo y margarina ( 115). Así mismo el uso de algoritmos y de la inteligencia artificial pueden llevar a dar por cierto y convencernos de que “nuestro futuro es el pasado “ cuando, recalca el autor “no tiene nada que ver”.
Vespìgnani ha trabajado principalmente en predicciones de enfermedades infecciosas mediante simulaciones computadoriales. Hoy, las mejores estrategias para combatirlas son el trabajo en equipo de biólogos, salubristas, matemáticos y economistas, principalmente entre investigadores norteamericanos y europeos.
En ese mundo desconocido, los modelos de simulación se basan en modelos probalísticos para detallar posibilidades de huracanes y terremotos, pero también, para prepararse a enfrentar crisis financieras y el llamado por el autor “contagio sicológico y social” ( sobre todo en el mundo de la sociedad de consumo)
Vespignani llama la atención sobre la importancia de las redes sociales, a veces con aspectos negativos, como las dinámicas de la información. Demuestra el autor, como “ las fake News se difunden más lejos y mas velozmente que las noticias verdaderas” (145). Y cómo se vuelve costumbre el impacto de las noticias virales ( “ independientemente de su contenido y veracidad” (147).
LIMITES Y CAMBIOS PARA BIEN Y PARA MAL
Lo importante, en fin de cuentas, a mi modo de ver, no es endiosar la tecnología de los algoritmos, sino comprender sus límites, para fortalecer al ser humano : “si bien no se cambia el futuro de los huracanes sí se puede cambiar la manera como las personas cambian su comportamiento al predecir el futuro” .
El autor recalca finalmente las condiciones para que las predicciones sirvan. Por ejemplo, deben abarcar un número elevado de humanos que, por cierto, no deben saber que se les está contando pues distorsiona la simulación. ¿ Preocupante?
En pocas palabras, no son indefectibles, sino virtuales, hasta que aparece la realidad que las compruebe. Puede aparecer lo imprevisto, y en todo caso, las previsiones son probalísticas y no reales. En ese sentido, Alessandro Vespignani recalca sus límites y cómo sus efectos no son sobre los sistemas mismos. Reitera que no pueden proyectarse de manera individual. a diferencia de los oráculos del pasado. Presentan además errores que inciden en las siguientes predicciones y , por lo mismo deben corregirse.
Impresiona cómo las redes sociales, por sus millones de usuarios y como simples “datos”, son una ayuda eficaz para las predicciones ( En el 2023, cuenta cómo ya pudieron analizar 400 millones de tweets en 190 países)
Pero, eso sí, no se puede desconocer que las predicciones tienen dos lados, como también los tenían los oráculos : permiten conocer mejor el futuro pero también , controlar y manipular, aunque del lado positivo, hayan logrado perfeccionar las medidas para afrontar huracanes, incendios y pandemias.
Para Vespignani, ante el inmenso poder de las predicciones de hacer el bien o el mal, requieren perfeccionar la ética del campo. Es decir, la reflexión sobre sus consecuencias y la manera de comportarse. Porque, como todo lo humano, existe una ética de las prevenciones y el uso de los big data le sirve de base.
Esta ética incluye consenso informado, limitación a la redistribución de datos, transparencia y regulaciones éticas y jurídicas para la defensa del interés público . Por ejemplo, señala , Google o Facebook no deben robar datos (175)
En este momento los datos que sirven para las predicciones no bajan al nivel individual, pero lo harán, Por eso es tan importante que los humanos recordemos que somos algo más que datos , y tengamos conciencia del poder de predicción que lleva a las empresas como Spotify a decidir que lista de canciones nos gustan. Eso se logra venciendo el analfabetismo computacional como lo llama Vespignani: no aceptar lo inaceptable y, a la larga, impedir la formación de castas.
“ Hoy ya no es aceptable conocer tres idiomas pero no tener la menor idea del lenguaje de un computador” resume el autor y se refiere a los que, sobre todo viejos – agrego yo- se limitan a decir , "yo no entiendo nada de eso de los computadores y de la ciencia de los datos y por eso no me interesa. ”
Agrega, para terminar, - y no nos quepa duda : “ahora que sabemos quienes somos y cómo funciona el entorno digital, el futuro nunca será igual a lo que era antes”.
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*( los números entre paréntesis indican la página).
Interesante. De leer algo queda,gracias
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