jueves, 12 de septiembre de 2013

OTRAS ENSEÑANZAS DE LOS PAROS



¿Consecuencias de la protesta social?

La protesta social puede  considerarse  desde el aspecto positivo (como avance   en la construcción  de democracia, como  activismo de sectores antes excluidos,  como paso de la  sumisión y del fatalismo  a la acción  y a la creencia en  lograr ser actor  colectivo de cambio social, más allá de las discursividades o de la anomia). 

También  las últimas semanas  han destacado  sus aspectos negativos, como  manipulación de los protagonistas, etapa primaria  de marchas y  peticiones inmediatistas, sin proyección  ni contextualización.  

 Algunas  conclusiones y preguntas para salir del trillado  encierro:
·        

  • Salieron  a flote tanto el descontento de la desigualdad como  el activismo organizado de  nuevos movimientos como la  Marcha Patriótica.  ¿Cómo serán las relaciones entre FARC, UP y Marcha Patriótica y los demás  brotes de descontento?
  • Los gremios  elitistas perdieron poder ¿Cuales lo reemplazarán?  ¿Superarán la etapa primaria de la protesta, es decir las marchas y las mesas?
  • Salió a relucir la brecha entre lo urbano y lo rural, en particular a través de los  desvergonzados comentarios de los pontífices  radiales y televisados, que hablan de “los campesinos” con cierta connotación de “pobrecitos, no saben lo que  hacen”.
  • ¿Serán las TICs un elemento  de contacto directo de las aspiraciones  rurales  en el  futuro, sin pasar por  los pontífices  académicos y periodísticos  que  se muestran como “salvadores” teóricos  e intérpretes del “campesinado”, como   antes sucedió con los indígenas y los afrocolombianos ?
  • Se  detectaron diferencias  en las  causas de las protestas  y  prevalencia de los intereses  egoístas y específicos.  ¿Cómo  armar  el rompecabezas de las reivindicaciones sectoriales hacia un contrapeso eficiente  de los  poderes  existentes en lo rural  ( por ejemplo, los que se oponen a la restitución de tierras caricaturizándola y  argumentando que impidió el desarrollo rural;  los  Guerras  Tulenas et al)
  •  ¿Tendrán los nuevos líderes el perfil de los antiguos?
  •   Tanto por parte de los protagonistas como  del periodismo audiovisual que se solazó con  imágenes de  piedras y bloqueos, no hay contextualización sino  predominio de la inmediatez. ¿Cuál es el panorama  al mediano plazo?
  •  El deficiente cubrimiento mediático  se  empeña en encerrarse  en  descripciones   generales que no  desmenuzan las causas. ¿ Aumentarán las excepciones, como son los bienvenidos aportes de no pocos   periodistas económicos que empezaron a  hablar de cifras, de fertilizantes,  de productividad, en vez de quedarse  en  las generalidades de los TLC, las indifinibles  reservas campesinas, o las  bondades de los palmeros? 
  • ¿Por qué  no  se  afronta  el tema del  “Estado  bloqueado”? ¿Por qué no se  analiza  el papel   de gobernadores y alcaldes en el desarrollo  rural y todo se referencia al gobierno central, sin tampoco  analizar sus matices y contradicciones?
  •  ¿Donde están las nuevas cohortes de académicos que reemplacen los  tradicionales  teóricos? ¿ Por qué esas nuevas generaciones  están cada vez más ausentes de los  programas de opinión, frente a los eternos políticos  en trance de saber de  todo y citados como fuente de sabiduría de lo divino y de lo humano ?


No hay comentarios:

Publicar un comentario