Una de las mayores sorpresas de este periodo pre-electoral es la
magnitud de la campaña
propagandística de Cambio Radical. No solo en los medios masivos, sino
en vallas de un gran número de municipios y en medios
locales. ¿Se convertirá la sorpresa en indignación cuando se
revele la cuantía de ese
esfuerzo?
La sorpresa proviene también
de la capacidad de mimetismo del liderazgo de Germán
Vargas Lleras, vice-Presidente
de la República.
Quienes lo conocen de cerca- no es mi caso y solo me consta que saluda a quien le sirve- se sorprenden también por la manera humilde como se sienta, callado, al lado del Presidente en cuanta firma de infraestructura vial se promociona. Eso si, con el debido y discreto crédito como eminencias grises: Vice presidencia y Ministerio de Transporte. ¿ Se sorprenderá el país cuando en dos años se anuncie la candidatura presidencial del discreto funcionario? ¿Se arrepentirá el Presidente Santos de haberle dado tanto “vuelo rolo”?
La capacidad mimética de Germán
Vargas Lleras se traduce en respuestas como la que da cuando se le reprocha seguir inaugurando obras y firmando contratos : "Que vengan todos, porque lo mío va por un lado y las elecciones de octubre por otro." También, llega a tales extremos, que se fue de vacaciones muy
anunciadas dejando pataleo de sus seguidores
porque no los invitaron a Cuba. Por supuesto no soy tan malpensada para darle a
esa ausencia un sentido
diplomático. ¿ O de
estrategia para luego golpear con
más fuerza en el posconflicto y aglutinar
los opositores del acuerdo con
las FARC?
Porque otra sorpresas de Cambio Radical proviene de su capacidad
estratégica. Encontró respaldos elocuentes
en el clan de los delfines de los mártires de la mafia, al colocar a Rodrigo Lara como Presidente del partido y a Carlos Fernando Galán de mascarón de proa. El segundo
tuvo al menos la ética de sentido
común al renunciar por
su desacuerdo con ciertos avales de podredumbre.
En todo caso, no dudo en afirmar que los primeros sorprendidos
serían Rodrigo Lara padre y Luis
Carlos Galán padre. Sorprendidos por la
capacidad del nieto del
Dr. Lleras Restrepo de aglutinar
lo más granado de los apellidos mártires, ellos que se rebelaron contra el
nepotismo de la era turbayista.
Lo sorprendente para quienes conocimos a los tres modelos políticos de otras épocas y con otros ideales, es comprobar
como esta nueva manera de ejercer
la política – para “malutilizar” el lema del admirado fundador del Nuevo Liberalismo- no pone reparos: ni en cuanto
a avales, a candidatos, a utilización electorera de la función pública. Y callan
ante el desempeño demostrado de
kikos y kikas, que vuelan y
volaron al amparo de las acogedoras alas
del Cambio Radical.
Pero también debería sorprender que apoyen a
su candidato estrella Peñalosa, que a su turno, se cuida mucho de
hacerle demasiado bombo a ese apoyo ,
salvo cuando monta en bicicleta con Carlos Fernando Galán. ¿Será porque los
une indisolublemente esa capacidad de pedalearle al “cambio”?
SIN
COMENTARIOS: LO QUE SIGUE ES TOMADO DE
WIKIPEDIA Y NO OBEDECE A LA
BASTANTE OPORTUNISTA CARTA FIRMADA POR VARIOS PARLAMENTARIOS QUE NO SE
CARACTERIZAN PROPIAMENTE POR SER MODELOS DE ÉTICA.
Cambio
Radical es un
partido político colombiano, de origen liberal, que hizo parte de la coalición
de gobierno de Álvaro Uribe Vélez hasta 2009, y actualmente hace parte de la coalición de gobierno del
presidente Juan
Manuel Santos. Es uno de los partidos políticos más afectados por sus presuntos nexos
con paramilitares. Hasta abril de 2008 por orden
de la Corte Suprema de Justicia y de la Fiscalía han sido detenidos siete congresistas de esta agremiación política y otros
más están siendo investigados dentro del llamado escándalo
de la parapolítica.
En
septiembre de 2009 el partido sufrió un transfuguismo de algunos de sus congresistas
que pasaron a las filas del Partido
de la U.2
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